El mes de mayo significa la transición a una época bien divertida para los niños: el campamento de verano. Mientras ellos participan en actividades entretenidas, también desarrollan otras destrezas, diferentes a las escolares que son igual de importantes para la vida.

En el campamento fomentarán el respeto por el medio ambiente, disfrutarán mucho tiempo al aire libre, mejorarán destrezas y habilidades a través de juegos y ejercicios, harán nuevos amigos y vivirán su día a día con normas más flexibles, que les permitirán gozar de todas las actividades que cada campamento ofrece.

Al igual que para la escuela, un campamento también conlleva preparativos. Están los preparativos  prácticos que incluyen el uniforme, el bloqueador solar y otros artículos. Y también, los preparativos emocionales pues se enfrentarán a un ambiente totalmente nuevo con otros niños y maestros desconocidos para ellos. Es el momento de reforzar su autoestima y de ayudarlos para acrecentar sus destrezas sociales.

Para poder hacer este trabajo con éxito es fundamental, hacer algunos pasos primero. A continuación, compartimos una lista de sugerencias:

  1. Examen físico – Durante el año escolar, el niño solo visita a su pediatra en caso de enfermedad. Este es el momento para realizarle un chequeo completo de su salud o vacunarse, lo cual puede garantizarle que esté sano para participar de todas las actividades.
  2. Explícale la dinámica – Para crear niños asertivos es importante que se les explique qué esperar. Si es posible, visiten juntos el lugar en donde se llevará a cabo el campamento. Hablen sobre el uniforme, el tipo de actividades, la cantidad de niños en los grupos, y la edad y vestimenta de los líderes, para que ellos entiendan que, aunque son jóvenes en ropa deportiva o pantalones cortos, también son una figura de respeto.
  3. Estudia las actividades – Identifica si tu hijo tiene algún impedimento físico o de salud para participar en alguna de las actividades para que puedas comunicárselo a su líder. De igual forma, si ves que alguna clase o taller de la lista puede no ser de su agrado, anímalo a participar y lograrlo.
  4. Empaquen juntos – Hazlo partícipe de su bulto. Pregúntale en cuál bolsillo quiere llevar el bloqueador solar, y en cuál la merienda. Si hay piscina explícale que la bolsa plástica es para la ropa mojada, entre otras instrucciones básicas. Enséñale en donde le escribes el nombre a sus pertenencias y la importancia de que esté pendiente de ellas.
  5. Responsabilidades inusuales – El ambiente controlado del salón de clases evita que su hijo tenga ciertas responsabilidades. Más no necesariamente será así en el campamento. El mismo niño es responsable de hidratarse, de reaplicar bloqueador solar, de no perder su uniforme en el baño cuando se cambian de ropa, de recordar en cual de todos los lugares dejó su bulto y en estar pendiente hacia donde se mueve su grupo. Repasa con él esta lista. Asumir estas nuevas e inusuales responsabilidades lo hará crecer, madurar y sentirse orgulloso de sí mismo.

El éxito del disfrute del campamento de verano está en participar de sus actividades, conocer nuevos amigos, convivir con otros niños y vivir nuevas experiencias para su desarrollo emocional y físico. ¡Ánimo, preparación y a disfrutar el verano!