A veces vemos personas que tienen la parte superior del cuerpo normal, pero sus caderas o piernas son mucho más grandes, incluso en desproporción al resto del cuerpo. Usualmente pensamos que es obesidad, pero si su parte de arriba del cuerpo es desproporcionada a la parte de abajo, es posible que sea lipedema. Esto es una enfermedad muy común que afecta principalmente los muslos, caderas, pantorrillas (batatas) y tobillos, y no debe confundirse con la obesidad ni con la celulitis.
El lipedema es una enfermedad crónica y progresiva, eso quiere decir que a medida que pase el tiempo la parte inferior del cuerpo continuará creciendo, afectando la imagen y en algunas ocasiones afectando también la calidad de vida. Esto puede ser así ya que puede causar dolor y molestias en las piernas, lo que dificulta caminar o realizar actividades diarias. Además, la hinchazón y el cambio en la apariencia del cuerpo pueden afectar la autoestima y la salud mental de la persona, disminuyendo así su calidad de vida.
El lipedema significa que hay demasiada grasa en la parte inferior del cuerpo. La grasa se acumula de manera extraña debajo de la piel, generalmente desde las nalgas (glúteos) hacia abajo. Al principio, es un problema de apariencia, pero con el tiempo puede causar dolor y otros problemas. Es una enfermedad que ataca mayormente a las mujeres.
Los síntomas incluyen: aumento de volumen, hinchazón y tumefacción, piel dura al tacto y zona inferior del cuerpo desproporcionada al resto del cuerpo. Los síntomas empeoran con la menstruación, el calor y el ejercicio físico y la inflamación. La zona se va convirtiendo en más sensible al frío, al contacto y a la presión, por ejemplo de la ropa. Un pellizco suave puede significar mucho dolor para una paciente de lipedema.
En esta enfermedad, se le llama Grados a la forma de clasificarlo, de acuerdo a cuan avanzada esté la enfermedad:
- La piel se siente suave, pero con pequeños bultos de grasa que se pueden tocar.
- La piel se siente dura e irregular debido a más bultos de grasa.
- La piel está muy hinchada, especialmente en caderas y tobillos, con muchos bultos de diferentes tamaños.
Para diagnosticar el lipedema, el doctor examina las piernas del paciente. También puede realizar estudios como MRI, CT, sonograma, DEXA que mide la densidad ósea, o imágenes de medicina nuclear. Si te han diagnosticado lipedema o crees que podrías tenerlo, te recomendamos hacer una cita con tu médico para que pueda evaluarte y recomendarte algún tipo de tratamiento. Una de las soluciones puede ser una liposucción, tipo de cirugía estética, para eliminar el exceso de grasa que hay en las áreas acumuladas.
El lipedema no tiene cura, pero hay tratamientos que pueden ayudar a mejorar los síntomas.
- Ejercicio y una dieta saludable
- Las medias de compresión pueden ayudar a reducir el dolor y mejorar los síntomas.
- Cremas hidratantes para la piel
- Suplementos antioxidantes. Por ejemplo, el selenio puede mejorar la inflamación y los suplementos para quemar grasa pueden ayudar a reducir la grasa.
- La liposucción puede eliminar la grasa y reducir el dolor.
- Cirugía bariátrica
Recuerda consultar con tú médico si tienes dudas sobre esta condición o cualquier situación de salud que requiera atención médica.
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